Escribano Hernández, Asunción (2006), Comentario de textos periodísticos: informativos, interpretativos y de opinión, Ediciones Universidad de Salamanca, Salamanca (España)
CI ¿Qué es la crítica periodística? F1
Definición de crítica.
"La crítica es el artículo de opinión en el que un especialista juzga una obra artística de actualidad. En ella se analizan, con mayor o menor profundidad, productos culturales diversos como son obras literarias, cinematográficas, pictóricas, arquitectónicas, etc."!85p., (Libros práctocos;10)
Esta definición toma en cuenta que la crítica la hace un especialista y que la obra analizada debe ser de actualidad; no obstante, la metodología de una críticadebe, en realidad, ser capaza de brindar luz incluso sobre obras del pasado ya sean obras maestras u obras cuya trascendencia no haya sido tan impactante.
lunes, 15 de octubre de 2012
lunes, 3 de octubre de 2011
El regreso más esperado del año
El Centro Unioversitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) de la Universidad Nacional Autónoma de México, cambiará su antigua cede ubicada en Adolfo Prieto para regresar a la intimidad de Ciudad Universitaria. Las nuevas instalaciones se ubicarán en el circuito Mario de la Cueva en CU, enfrente de la facultad de Ciencias políticas y sociales, a un costado de TV UNAM. La mudanza, o mejor dicho, el regreso a CU (en un inicio las clases se impartían en edificios prestados de las facultades de Ciencias y Filosofía y letras), será a un edifico dos veces veces mayor que el actual. Este nuevo inmueble contará con una nueva sala de exhibición y una sala de grabación de sonido THX, además que vendrá acompañado de un aumento a su matrícula pues, actualmente, la escuela acepta a solamente 15 estudiantes al año de entre 500 aspirantes.
El cambio se preveé para finales del 2011: "La idea es que nos entreguen el edificio hacia octubre o noviembre" acotó Armando Casas, actual director del CUEC.
El cambio se preveé para finales del 2011: "La idea es que nos entreguen el edificio hacia octubre o noviembre" acotó Armando Casas, actual director del CUEC.
lunes, 19 de septiembre de 2011
Estética del arte cinematográfico
Sobre la naturaleza del arte
Es de lo más común ir a una sala de cine y, mientras nos encaminamos a la sala que nos corresponde, tomparnos con algún espectador saliendo de ver alguna otra película y comentando "no me gustó. Eso, simplemente no es real." Muchas veces, y particularmente tratándose de artes anecdóticas como los son el teatro (no lo escénico, ni lo teatral, ni lo performativo) la literatura y el cine, olvidamos por completo que, lo que vamos a ver no es la realidad. La realidad, y esto debe quedar muy claro, es inmensa, infinita, inabarcable, inacabable, inconmensurable. Así que si tratáramos de sintetizar toda la realidad, por ejemplo, en una película, terminaríamos por fallar. Pero un proceso de selección, organización y reestructuración de los elementos de la realidad es lo que hace a la obra de arte lo que es. De tal suerte que, el arte, no es mostrar la realidad en su totalidad, sino un fragmento de ésta vista desde una óptica determinada.
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El cine como arte, Ralph Stephenson, J.R.Debrix, Labor, tr. Ramiro Sánchez, Sanz, Barcelona, 1973, p.13
Al reflexionar sobre la estética del cine, conviene acercarse a la película "como si se contemplase a un solo miembro de una gran familia." que es el arte.
Es de lo más común ir a una sala de cine y, mientras nos encaminamos a la sala que nos corresponde, tomparnos con algún espectador saliendo de ver alguna otra película y comentando "no me gustó. Eso, simplemente no es real." Muchas veces, y particularmente tratándose de artes anecdóticas como los son el teatro (no lo escénico, ni lo teatral, ni lo performativo) la literatura y el cine, olvidamos por completo que, lo que vamos a ver no es la realidad. La realidad, y esto debe quedar muy claro, es inmensa, infinita, inabarcable, inacabable, inconmensurable. Así que si tratáramos de sintetizar toda la realidad, por ejemplo, en una película, terminaríamos por fallar. Pero un proceso de selección, organización y reestructuración de los elementos de la realidad es lo que hace a la obra de arte lo que es. De tal suerte que, el arte, no es mostrar la realidad en su totalidad, sino un fragmento de ésta vista desde una óptica determinada.
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El cine como arte, Ralph Stephenson, J.R.Debrix, Labor, tr. Ramiro Sánchez, Sanz, Barcelona, 1973, p.13
Al reflexionar sobre la estética del cine, conviene acercarse a la película "como si se contemplase a un solo miembro de una gran familia." que es el arte.
martes, 13 de septiembre de 2011
El guion ¿relato, drama o cine?
No son pocas las veces que se ha debatido sobre la naturaleza del guion cinematográfico como relato, drama o una especie nueva y única que forma parte del proceso cinematográfico.
Primeramente debemos enfrentar la discusión sobre si es o no literatura y, para entendernos mejor, estimado lector, partamos del supuesto de que, en efecto, el guion cinematográfico es literatura porque:
a)está basado, genéricamente hablando, en la literatura dramática, es decir, que cualquier guion cinematográfico tiene por estructura, alguna de los siete géneros dramáticos que la mtra. Luisa Josefina Hernández ha reconocido en la obra dramática (tragedia, comedia, pieza, melodrama, tragicomedia, obra didáctica o farsa) no importando si el guion es una adaptación del algún género narrativo (novela, cuento, etc.) éste termina por codificarse en literatura dramática desde las obras más sensibles de realizadores como Welles, Bergman, Hitchcock, etc., hasta el "churro" más inmundo de Hollywood.
b)haciendo una analogía con lo que escrbió Anne Ubersfeld (toda distancia guardada) sobre el texto dramático (literatura) y fenómeno teatral (representación escénica) encontramos que es el mismo caso que hay con el texto dramático-guion cinematográfico (literatura) y el fenómeno fílmico (representación cinematográfica) sólo que con un formato visual distinto.
No obstante, en las escuelas de cine y "chambeando" en los medios me di cuenta que se maneja de una manera totalmente distinta. Se escucha a los directores y a los productores decir que el formato de un guión es específico y pocas veces alterable porque está hecho para que todos entiendan lo que tienen que hacer "no es arte, es un guión" se escucha en las locaciones o en los sets de filmación. Y claro que un guión técnico cumple con esa función, pero...¿el guión lierario? ¿no merece éste considerarse igualmente arte como un libreto teatral o una novela? ¿no cuenta acaso una historia que puede hacer la diferencia entre una obra maestra y un bodrio fílmico? ¿no se ocupa, igualmente lenguaje literario para escribir un guión? Personalmente encuentro el trabajo de un guionista susceptible de ser llamado artístico por las razones expuestas en los dos primeros puntos, aunque entiendo que no pueden permitirse licencias literarias que no saldran en la puesta en cámara. Digamos que es casi inaudito encontrar guiones con licencias talescomo las que hace Eugéne Ionesco en las acotaciones del primer acto de su "Cantante calva" o lo que hace Eugéne O´ Neal en su "Gran Dios Brown"; no obstante, no creo que no esté presente esta capacida literaria en los guiones cinematográficas como para no ser considerados un producto artístico. Por mi
parte me encantaría saber que piensa usted, estimado lector, sobre este tema. No deje de comentar su opinión y las razones que le hacen tomar tal o cual postura.
Primeramente debemos enfrentar la discusión sobre si es o no literatura y, para entendernos mejor, estimado lector, partamos del supuesto de que, en efecto, el guion cinematográfico es literatura porque:
a)está basado, genéricamente hablando, en la literatura dramática, es decir, que cualquier guion cinematográfico tiene por estructura, alguna de los siete géneros dramáticos que la mtra. Luisa Josefina Hernández ha reconocido en la obra dramática (tragedia, comedia, pieza, melodrama, tragicomedia, obra didáctica o farsa) no importando si el guion es una adaptación del algún género narrativo (novela, cuento, etc.) éste termina por codificarse en literatura dramática desde las obras más sensibles de realizadores como Welles, Bergman, Hitchcock, etc., hasta el "churro" más inmundo de Hollywood.
b)haciendo una analogía con lo que escrbió Anne Ubersfeld (toda distancia guardada) sobre el texto dramático (literatura) y fenómeno teatral (representación escénica) encontramos que es el mismo caso que hay con el texto dramático-guion cinematográfico (literatura) y el fenómeno fílmico (representación cinematográfica) sólo que con un formato visual distinto.
No obstante, en las escuelas de cine y "chambeando" en los medios me di cuenta que se maneja de una manera totalmente distinta. Se escucha a los directores y a los productores decir que el formato de un guión es específico y pocas veces alterable porque está hecho para que todos entiendan lo que tienen que hacer "no es arte, es un guión" se escucha en las locaciones o en los sets de filmación. Y claro que un guión técnico cumple con esa función, pero...¿el guión lierario? ¿no merece éste considerarse igualmente arte como un libreto teatral o una novela? ¿no cuenta acaso una historia que puede hacer la diferencia entre una obra maestra y un bodrio fílmico? ¿no se ocupa, igualmente lenguaje literario para escribir un guión? Personalmente encuentro el trabajo de un guionista susceptible de ser llamado artístico por las razones expuestas en los dos primeros puntos, aunque entiendo que no pueden permitirse licencias literarias que no saldran en la puesta en cámara. Digamos que es casi inaudito encontrar guiones con licencias talescomo las que hace Eugéne Ionesco en las acotaciones del primer acto de su "Cantante calva" o lo que hace Eugéne O´ Neal en su "Gran Dios Brown"; no obstante, no creo que no esté presente esta capacida literaria en los guiones cinematográficas como para no ser considerados un producto artístico. Por mi
parte me encantaría saber que piensa usted, estimado lector, sobre este tema. No deje de comentar su opinión y las razones que le hacen tomar tal o cual postura.
lunes, 28 de marzo de 2011
Cuadro por cuadro "¿Y los presuntos culpables?"
Parte de escribir una columna con pretenciones periodísticas tiene, o debiera tener, la responsabilidad de informar, educar y, la más importante de todas, orientar a la opinión pública. Es por eso que, con sumo cuidado, trataré de exponer, lo que a mi consideración debe observarse del documental mexicano Presunto Culpable.
Es muy cierto que es un documental que expone, no digamos los peores cosas porque eso supone que hay, por lo menos, un lado admirable, las inconsistencias y corrupción que hay en el sistema.
Es muy cierto, igualmente, que el "caballero" (si usted ya vió la película entiende perfectamente porque lo pongo entre comillas) que interpuso un amparo para que se quitara la película de cartelera argumentando que no le pidieron permiso para mostrar su imagen, estuvo asesorado. ¿O qué? No me digan que un pelmazo que no podía articular dos palabras seguidas, resulta que es un docto en cuanto a la ley de amparo. Si muchos abogados titulados ni la conocen bien.
Y con todo ese candor incendiario, coraje y demás pasiones que desata el filme, nos olvidamos de una situación importante: ¿qué pasa con los protagonistas de la historia? Con todo el respeto del mundo, me tomaré el derecho de decir que el caso de Toño, ahora, ya no importa, y estoy seguro que el estaría de acuerdo después de escuchar lo siguiente: Qué va a pasar con el australopithecus mexicanus que dio falso testimonio? Supongamos, de buena fé, que un error lo comete cualquiera, pero este sujeto, obró de mala fé desde el principio por las razones que usted guste y mande. Ya sea por dinero, coerción, que le "echaron el mal de ojo" o lo que sea, este individuo debe de aprender (y servir de ejemplo a los demás) que decir mentiras para condenar a un hombre inocente debe tener consecuencias. ¿o qué?, ¿ya se nos olvidó en menos de dos meses que hay alguien que quiere pasarse de listo con los derechos de los mexicanos? Y que me dicen del judicial, ese energúmeno, bueno, digamos, monigote (porque si algún día lee mi columna, quiero evitarle la fatiga de acudir al diccionario) que era en verdad un filósofo socrático que nada sabía. Seguro, si le hubieran preguntado su nombre, hubiera respondido -no sé-. ¿Y el teniente Saavedra? no se supone que el mismo filme sacó a la luz que esta gente obtiene premios por meter gente a la cárcel. ¿Alguien ya intentó hacer una investigación sobre si su ascenso fue realmente merecido o lo consiguió con presuntos culpables?. ¿Y la piltrafa humana que es el juez que hizo caso omiso a las declaraciones y documentos del abogado defensor? Démonos cuenta, ¿o alguien quiere un día estar en esa situación con ese juez que deliberadamente decide no poner la transcripción completa del juicio para que usted tenga que pasar 20 preciosos años de su vida en una celda? Y claro, no olvide a la risueña abogada de la fiscalía que persigue gente inocente "porque es su chamba" y que además de ser una bestia, cree que todavía está en la secundaria para decirle al maestro sobre la tarea -se la puedo entregar en disco luego?- mientras que usted está "refundiéndose en el bote"?. Y eso sin mencionar que podría parecer proceso inadecuado el hecho de que le entregan al juez un disco que contiene quien sabe que tipo de información como un mensaje "del jefe" diciéndole a quien proteger, que decir, o cuanto le van a pagar o hasta unas imágenes "porno sotroslos estudiantes" de la risueña gordita. Todo contal de obtener favores legales.
El caso del arte desde hace muchos años, ha dejado de ser sólo la contemplación para llegar a un punto de cambio social y, si sólo nos quedamos con la euforia del filme sin hacer nada, es como si nunca hubieramos visto la película. Con la valiosa información que se nos ha dado, tenemos armas. ¡Exijámos justicia!.
Y que no se le olvide nunca llevar una videocámara con usted, que bien podría hacerle la diferencia de 2 a 20 años de cárcel.
Es muy cierto que es un documental que expone, no digamos los peores cosas porque eso supone que hay, por lo menos, un lado admirable, las inconsistencias y corrupción que hay en el sistema.
Es muy cierto, igualmente, que el "caballero" (si usted ya vió la película entiende perfectamente porque lo pongo entre comillas) que interpuso un amparo para que se quitara la película de cartelera argumentando que no le pidieron permiso para mostrar su imagen, estuvo asesorado. ¿O qué? No me digan que un pelmazo que no podía articular dos palabras seguidas, resulta que es un docto en cuanto a la ley de amparo. Si muchos abogados titulados ni la conocen bien.
Y con todo ese candor incendiario, coraje y demás pasiones que desata el filme, nos olvidamos de una situación importante: ¿qué pasa con los protagonistas de la historia? Con todo el respeto del mundo, me tomaré el derecho de decir que el caso de Toño, ahora, ya no importa, y estoy seguro que el estaría de acuerdo después de escuchar lo siguiente: Qué va a pasar con el australopithecus mexicanus que dio falso testimonio? Supongamos, de buena fé, que un error lo comete cualquiera, pero este sujeto, obró de mala fé desde el principio por las razones que usted guste y mande. Ya sea por dinero, coerción, que le "echaron el mal de ojo" o lo que sea, este individuo debe de aprender (y servir de ejemplo a los demás) que decir mentiras para condenar a un hombre inocente debe tener consecuencias. ¿o qué?, ¿ya se nos olvidó en menos de dos meses que hay alguien que quiere pasarse de listo con los derechos de los mexicanos? Y que me dicen del judicial, ese energúmeno, bueno, digamos, monigote (porque si algún día lee mi columna, quiero evitarle la fatiga de acudir al diccionario) que era en verdad un filósofo socrático que nada sabía. Seguro, si le hubieran preguntado su nombre, hubiera respondido -no sé-. ¿Y el teniente Saavedra? no se supone que el mismo filme sacó a la luz que esta gente obtiene premios por meter gente a la cárcel. ¿Alguien ya intentó hacer una investigación sobre si su ascenso fue realmente merecido o lo consiguió con presuntos culpables?. ¿Y la piltrafa humana que es el juez que hizo caso omiso a las declaraciones y documentos del abogado defensor? Démonos cuenta, ¿o alguien quiere un día estar en esa situación con ese juez que deliberadamente decide no poner la transcripción completa del juicio para que usted tenga que pasar 20 preciosos años de su vida en una celda? Y claro, no olvide a la risueña abogada de la fiscalía que persigue gente inocente "porque es su chamba" y que además de ser una bestia, cree que todavía está en la secundaria para decirle al maestro sobre la tarea -se la puedo entregar en disco luego?- mientras que usted está "refundiéndose en el bote"?. Y eso sin mencionar que podría parecer proceso inadecuado el hecho de que le entregan al juez un disco que contiene quien sabe que tipo de información como un mensaje "del jefe" diciéndole a quien proteger, que decir, o cuanto le van a pagar o hasta unas imágenes "porno sotroslos estudiantes" de la risueña gordita. Todo contal de obtener favores legales.
El caso del arte desde hace muchos años, ha dejado de ser sólo la contemplación para llegar a un punto de cambio social y, si sólo nos quedamos con la euforia del filme sin hacer nada, es como si nunca hubieramos visto la película. Con la valiosa información que se nos ha dado, tenemos armas. ¡Exijámos justicia!.
Y que no se le olvide nunca llevar una videocámara con usted, que bien podría hacerle la diferencia de 2 a 20 años de cárcel.
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